En un reciente suceso en la localidad murciana de Totana, la Guardia Civil ha arrestado a un hombre de 35 años de origen ecuatoriano, a quien se le imputan múltiples delitos, incluyendo siete robos en viviendas, así como amenazas y agresiones. La detención se produjo tras una serie de informes de los vecinos que alertaron sobre avistamientos de un individuo escalando techos y terrazas con intenciones delictivas.

La investigación comenzó el mes pasado cuando los ciudadanos preocupados se comunicaron con las autoridades, informando sobre la presencia de un hombre que parecía estar irrumpiendo en diversas propiedades. Al investigar la situación, los agentes confirmaron que el sospechoso logró entrar en varias casas, incluso en algunas de las que sus propietarios estaban presentes durante el acto delictivo.

En el transcurso de la recopilación de pruebas en la escena del crimen, un nuevo reporte a la central de la Guardia Civil alertó sobre un posible altercado en una zona de ocio local. Los informes continuaron llegando, describiendo a un hombre que amenazaba a otros con un objeto cortante, específicamente el cuello de una botella rota, cerca de una discoteca.

Con celeridad, la Guardia Civil envió unidades de seguridad al lugar, donde se encontraron con un individuo agresivo. Las indagaciones revelaron que este hombre era responsable de varios robos y había agredido a una de las víctimas en el lugar.

A pesar de los intentos de los agentes por calmar la situación y controlar al sospechoso, este persistió en su comportamiento amenazante, llegando a proferir insultos y desafíos, indicando que tomaría las armas de los oficiales. Como resultado de su actitud, se procedió a su arresto bajo la sospecha de cometer delitos de amenaza, lesiones, hurto y ataques a la autoridad.

Las investigaciones realizadas han permitido establecer un perfil del detenido, quien cuenta con un extenso historial delictivo. Además, se identificaron múltiples vínculos entre el individuo y los robos perpetrados en la noche anterior en diversas viviendas de Totana, consolidando así las acusaciones en su contra.

La Guardia Civil sigue considerando al detenido como el principal sospechoso en relación con estos delitos, destacando la gravedad de los mismos, que incluyen no solo robos con fuerza, sino también amenazas y agresiones a personas y agentes de la ley.