Murcia, 5 de noviembre. El Centro de Restauración de la Región de Murcia (CRRM), vinculado a la Consejería de Turismo, Cultura, Juventud y Deportes, ha recibido hoy las esculturas secundarias que forman parte del paso del Calvario, perteneciente a la Real, Ilustre y Muy Noble Cofradía del Santísimo Cristo del Perdón. Este grupo participa en la procesión del Lunes Santo durante la Semana Santa murciana, un evento que goza del título de Interés Turístico Internacional.

Las imágenes del grupo, que tiene como figura central al Cristo del Perdón, presentan diversos tipos de daños provocados por su utilización en las procesiones, incluyendo rozaduras, pérdida de color y ligeros deterioros en la madera y en las bases. Por esta razón, se planea una intervención en el Centro de Restauración durante los próximos meses, con el fin de garantizar su conservación y devolverles su apariencia original, según han confirmado fuentes del Gobierno regional en un comunicado.

La consejera de Cultura, Carmen Conesa, destacó que "esta intervención es crucial para mantener la integridad material y estética del conjunto, al tiempo que se rinden homenaje a los valores históricos, artísticos y devocionales de las imágenes, asegurando su conservación para futuras procesiones de Semana Santa".

Además, Conesa informó que, en lo que va del año, el Gobierno ha invertido más de 200.000 euros en la restauración de bienes patrimoniales de la región.

El paso del Calvario, que incluye figuras emblemáticas como el Cristo del Perdón, la Dolorosa, San Juan y María Magdalena, se considera uno de los conjuntos más destacados de la imaginería procesional de Murcia. Este es resultado de la incorporación de obras de diferentes artistas desde que la cofradía fue fundada en 1896.

Las imágenes de la Dolorosa y San Juan, que datan del siglo XVIII, fueron inicialmente adaptadas hacia 1897 para darles la apariencia de esculturas completas. Posteriormente, se añadió la figura de María Magdalena, esculpida por Francisco Sánchez Araciel, con el objetivo de ofrecer una composición artística unificada.

El conjunto, con el icónico Cristo del Perdón, realizado en la primera mitad del siglo XVIII y atribuido a los talleres de Francisco Salzillo y Roque López, es uno de los símbolos más emblemáticos de la Semana Santa en Murcia, tanto por su valor artístico como por la profunda devoción popular que inspira.

Su presencia es particularmente significativa durante el besapié de la mañana del Lunes Santo y la posterior procesión de la tarde, creando una conexión especial con la comunidad y los fieles.