El 23 de noviembre en Murcia, la Consejería de Fomento e Infraestructuras ha anunciado mejoras significativas en la seguridad y confort de la carretera rápida de La Manga (RM-12). Este proyecto, que requiere una inversión de 1.341.890 euros por parte del gobierno regional, abarca un total de 8,3 kilómetros de la vía, reflejando un compromiso continuo con la infraestructura de la región.

Las obras, que comenzaron en septiembre y se espera que finalicen en diciembre, se centran en tramos específicos de la calzada derecha, desde el punto kilométrico 6,6 hasta el 9,3 y desde el 11,3 al 14. Asimismo, se mejorará el lado izquierdo de la vía en una sección que va del 11,3 al 14, a la altura de Los Belones. Este esfuerzo pretende no solo actualizar la carretera, sino también facilitar el acceso a diversas áreas importantes dentro de la Región de Murcia.

Francisco Carrillo, director general de Carreteras, realizó una visita a las obras para evaluar el progreso y afirmó que estas mejoras “supondrán un incremento en la seguridad y el confort de una de las vías de mayor tráfico en nuestra red regional, esencial para acceder a uno de los principales destinos turísticos de la región.” La RM-12 no solo conecta a turistas, sino que también es vital para los residentes de comunidades como Los Nietos, Mar de Cristal y Playa Honda, así como para localidades críticas como La Unión y Portmán.

Durante su visita, Carrillo subrayó la relevancia de la RM-12 como acceso estratégico a la autopista AP-7 y otros núcleos urbanos, lo que la convierte en una arteria crucial para el desarrollo económico y turístico de la zona. Además, es la puerta de entrada al Parque Regional de Calblanque, Monte de las Cenizas y Peña del Águila, espacios naturales que deben preservarse y ser accesibles para todos.

Los trabajos realizados se inscriben dentro de una serie de iniciativas para mejorar la conservación de las vías regionales, enfatizando la importancia de mantener la calidad del pavimento, el cual está constantemente expuesto a las exigencias del tráfico y a las inclemencias del tiempo. La intervención incluye el recrecido de la carretera con dos capas de aglomerado, una acción técnica que aumentará la durabilidad y la seguridad de la vía.

Además de la mejora del pavimento, el proyecto incorporará otras reformas relevantes, como el fresado en áreas específicas, el refuerzo de las barreras biondas, la protección de las bermas con hormigón sólido, y una renovación completa de la señalización horizontal junto con la reposición de juntas en los puentes existentes a lo largo de estos tramos. Estas acciones consolidan la misión de asegurar que la red de carreteras no solo soporte la carga del tráfico, sino que también ofrezca un viaje seguro y placentero a todos sus usuarios.