La Junta de Gobierno Local de Cieza estudiará este lunes por la tarde la posibilidad de decretar luto oficial por la muerte de una vecina presuntamente asesinada por su expareja. El alcalde, Tomás Rubio, junto con varios concejales, ha asistido al minuto de silencio en señal de duelo. La comunidad educativa del Colegio Cristo Crucificado también ha manifestado su pésame, encabezados por su director, Manuel Egea.

Rubio ha expresado su consternación por la situación, destacando que el minuto de silencio se ha llevado a cabo en memoria de la víctima y en solidaridad con su familia. Confirmó que los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Cieza estaban trabajando en el caso, dando seguimiento a las denuncias de malos tratos y amenazas contra la expareja. Asimismo, el área de Política Social ha activado mecanismos para brindar apoyo a la hija de la fallecida, quien está siendo atendida por psicólogos.

El Ayuntamiento también ha ofrecido apoyo al colegio donde estudia la pequeña, proporcionando un equipo de profesionales para ayudar a la comunidad escolar en el proceso de duelo. El alcalde reconoció la complejidad de seguir de cerca a todas las víctimas de violencia de género con órdenes de alejamiento por parte de las fuerzas de seguridad.

El Ayuntamiento de Cieza celebrará una Junta de Gobierno por la tarde para discutir la posibilidad de decretar luto oficial por la muerte. Además, se ha convocado a la ciudadanía a un acto de duelo y repulsa del crimen en la Esquina del Convento, donde se guardará un minuto de silencio. La consejera de Política Social, Familias e Igualdad, Conchita Ruiz, ha confirmado su asistencia.

El Ministerio de Igualdad ha confirmado la naturaleza machista de los asesinatos de tres mujeres en Cieza, Castelló de la Plana y Orihuela. En lo que va del mes, siete mujeres han perdido la vida a manos de sus parejas o exparejas, 47 en lo que va del año y 1.231 desde 2003.

La víctima, de 34 años, llevaba viviendo en Cieza desde hace una década. Desapareció el pasado miércoles y fue su hermano quien dio la voz de alarma. La Guardia Civil encontró su cuerpo sin vida en una zona de difícil acceso. Su expareja había sido detenida previamente por quebrantar una orden de alejamiento y se le investiga por un delito de homicidio y otro de quebrantamiento de medida cautelar.