La Consejería de Medio Ambiente, Universidades, Investigación y Mar Menor ha puesto en marcha un ambicioso proyecto de restauración que abarca 81 kilómetros de caminos forestales en Moratalla. Esta iniciativa busca fortalecer la conectividad ecológica en el Noroeste y potenciar la conservación de áreas naturales, conforme a la información proporcionada por fuentes oficiales de la Comunidad.

Este lunes, el consejero Juan María Vázquez, acompañado por el alcalde de Moratalla, Juan Pascual Soria, realizó una visita a las obras en curso, que están diseñadas para "facilitar el acceso a zonas de significativo valor ecológico, además de mejorar su conservación, vigilancia y gestión ambiental".

La inversión total en este proyecto asciende a 737.000 euros, financiados en parte por el programa europeo del Mecanismo de Recuperación y Resiliencia (Next Generation EU).

Juan María Vázquez enfatizó que “la recuperación de estos caminos va más allá de una simple obra física. Es una apuesta significativa por el futuro de nuestros montes y de las comunidades que dependen de ellos”. Además, resaltó que estas vías son cruciales para la vigilancia forestal, la prevención de incendios, así como para garantizar el acceso a ganaderos, agricultores y residentes de la zona.

El consejero también subrayó el compromiso del Gobierno regional con Moratalla, un municipio estrechamente vinculado a su entorno natural. Según indicó, “estos caminos no solo conectan espacios protegidos, sino que también son vitales para el día a día de muchos habitantes, fomentando la actividad forestal, la ganadería extensiva y el turismo”.

Las obras, que se llevarán a cabo hasta finales de año, abarcan la restauración de diez caminos situados en áreas de gran valor ecológico, como la Sierra de la Muela, la Sierra del Buitre, la Rogativa, Inazares y Revolcadores, dentro de la Red Natura 2000.

Las labores a realizar consisten en la mejora de la superficie, el acondicionamiento de explanadas y la limpieza y rehabilitación de sistemas de drenaje, así como la estabilización de taludes. Se prevé que todas las intervenciones sean de bajo impacto ambiental, adaptándose a las particularidades de cada camino.

Uno de los ejes fundamentales del proyecto es la revitalización de la vía pecuaria Cordel de Cehegín, que constituye una ruta clave en la estructura del territorio natural de Moratalla, permitiendo el tránsito de rebaños trashumantes y senderistas. Este corredor ecológico favorece el enlace entre distintos hábitats y el movimiento de diversas especies.

Las actuaciones se llevan a cabo en áreas clasificadas como Lugares de Interés Comunitario (LIC), Zonas de Especial Conservación (ZEC) y Zonas de Especial Protección para las Aves (ZEPA), que destacan por su diversidad natural. La restauración de estos caminos es fundamental para mantener su funcionalidad ecológica y asegurar la protección de especies y ecosistemas.

“Estamos forjando una red de caminos forestales que sea más segura y resiliente frente a los incendios y tormentas”, aseguró el consejero, “pero que también sea útil para el desarrollo sostenible del territorio”.

Este proyecto es parte del Plan de Recuperación, Transformación y Resiliencia (PRTR) de España, que promueve la restauración ecológica y la creación de infraestructura verde. Además de los beneficios ambientales, busca dinamizar el ecoturismo y resaltar los paisajes del Noroeste, especialmente en verano, cuando la floración de la lavanda atrae a un número creciente de visitantes.

El consejero concluyó señalando que este esfuerzo también representa una oportunidad para fomentar una convivencia armónica entre las personas y el entorno natural. “Estas infraestructuras verdes son cruciales no solo para la conservación ambiental, sino también para respaldar a aquellos que mantienen vivo este territorio. El Noroeste murciano es uno de los grandes patrimonios naturales de nuestra Región y su cuidado es una prioridad para nuestro Gobierno”, afirmó Vázquez.