El 20 de octubre en Murcia, el antiguo presidente de la Comunidad, Ramón Luis Valcárcel, se presentó como testigo en el juicio relacionado con el polémico caso Novo Carthago, celebrado en el Palacio de Justicia. Durante su declaración, Valcárcel insistió en que no fue parte activa en la aprobación del proyecto urbanístico, subrayando que su participación se limitó a un contexto político.

En la décima sesión del juicio, que se extenderá hasta el 20 de noviembre, Valcárcel respondió a las preguntas del fiscal anticorrupción y afirmó que no se enteró del desarrollo del proyecto hasta que fue invitado a su presentación oficial por Hansa Urbana en julio de 2003. Aseguró que asistió a esa reunión como representante del Gobierno regional, ya que consideraba que era de interés para la comunidad, pero que ni su consejero de Agricultura ni la alcaldesa de Cartagena le habían informado previamente.

El expresidente dejó claro que si hubiera tenido alguna duda sobre la viabilidad del proyecto, él y su consejero no habrían asistido a la presentación. Además, subrayó que, de haber sabido que el proyecto implicaba un impacto sobre un espacio natural protegido, no habría participado en el evento.

Valcárcel también se mostró sorprendido al ser preguntado sobre una reunión que tuvo lugar en mayo de 2004 en el Palacio de San Esteban, donde participó su consejero y un abogado de Hansa Urbana. Declaró no conocer a los asistentes de esa convocatoria y reiteró que su rol se limitaba a cuestiones políticas, no técnicas.

El exmandatario enfatizó que nunca se reunió con representantes de Hansa Urbana, argumentando que no tenía capacidad de decisión sobre tales asuntos y que su función era más bien política, apoyada por un amplio equipo de funcionarios y consejeros.

En una ocasión en la Asamblea Regional, cuando la oposición insinuó que el Gobierno estaba interesado en ciertos proyectos, él aseguró que no se llevaría a cabo ninguna construcción en Lo Poyo. Valcárcel insistió en que bajo su administración no se aceptaron tales iniciativas, confirmando que no se había avanzado en la edificación del proyecto Novo Carthago.

Por su parte, Francisco Marqués, quien se desempeñó como consejero de Medio Ambiente y Ordenación del Territorio entre 2004 y 2005 bajo la presidencia de Valcárcel, también fue llamado a declarar. Marqués sostuvo que el proceso del macroproyecto estaba casi cerrado cuando asumió el cargo y destacó que su antecesor no le proporcionó detalles sobre Novo Carthago. También afirmó que todos los jefes de servicio de Medio Ambiente estaban alineados en aplicar un nuevo plan de ordenación que modificaba uno anterior.